A pesar de que existen diversos métodos para purificar el agua que sale de un proceso determinado, se requiere conocer las técnicas y la medición de parámetros ambientales del agua, que determinan si tal líquido puede ser vertido de modo directo a las fuentes hídricas con bajo o nulo impacto en el ecosistema local.
Una vez caracterizada el agua de un proceso, pueden establecerse las acciones a tomar para descontaminarla y retirar aquellos compuestos tóxicos o con elevado impacto ambiental.